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DARIO RAMOS SOTO FACILITADOR JUDICIAL COMUNITARIO DE LA COMUNIDAD DE AROSEMENA CENTRO, DISTRITO DE LA CHORRERA



Darío Ramos Soto, nació un 18 de noviembre de 1958 en el distrito de Las Minas, Provincia de Herrera comunidad de El Algodón. Emigró en el año 1968 a la provincia de Colón, en donde curso sus estudios primarios en la escuela La Humildad, corregimiento de Ciricito, distrito de Colón, provincia de Colón.  EL señor Darío actualmente reside en La Chorrera, Corregimiento de Arosemena, comunidad de Arosemena Centro, provincia de Panamá Oeste  desde el año 2000, desde entonces se ha dedicado al servicio de su comunidad impartiendo charlas en la escuela, casa comunal, para niños, niñas, adolescentes y jóvenes   ya que el mismo relata de voz propia que ellos son el futuro de nuestro país y es por eso que  hay que educarlos con principios, valores y respeto hacia los demás. Ha pertenecido al comité de agua de la comunidad, comité de salud, comité pro navidad de Arosemena, dirigió el equipo de béisbol  de la comunidad entre otras actividades más en las que ha participado.   

             

 Inició como Facilitador Judicial Comunitario un 10 de octubre del 2011, al ser  propuesto y elegido por los moradores de su comunidad mediante cabildo abierto en la casa comunal, ante representantes de la OEA y personal del Órgano Judicial.  Desde hace más de once años, a formado parte del Sistema de Facilitadores Judiciales Comunitarios, siendo un brazo auxiliar del Órgano Judicial, sirviendo como puente de acceso a la justicia entre los moradores de su comunidad y las diferentes autoridades de Justicia, a través de orientaciones, acompañamientos, asesorías, multiplicando la información recibida por medio de capacitaciones en diversos temas de interés para los moradores, las cuales son dadas bajo la colaboración del Juzgado Segundo Municipal Civil del Distrito de La Chorrera, a cargo de la Licenciada Mariette Velarde de Huang. 

 

A pesar que en pandemia sufre un infarto, le da el covid-19, el cual lo mantuvo por meses hospitalizado y alejado del servicio, Don Darío nunca pensó en renunciar o abandonar este prestigioso servicio de voluntariado el cual realiza con mucho orgullo y convicción, ya que a través del mismo ha crecido personalmente gracias a las capacitaciones recibidas, y lleva plasmado en su corazón ayudar siempre al prójimo como a los moradores de su comunidad. 

 

La comunidad de Arosemena Centro, del distrito de La Chorrera siente orgullo y agradecimiento con Don Darío Soto y la gran gran labor que realiza en pro de su comunidad.



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