TRIBUNAL DE JUICIO ORAL DE SAN MIGUELITO CONDENA A 50 AÑOS DE PRISIÓN A ABOGADA POR HOMICIDIO Y OTROS DELITOS

El tribunal de juicio oral del Segundo Circuito Judicial, en San Miguelito, conformado por las juezas Mirna Córdoba (presidenta), Milena Vega (relatora) y Anabel Varela (tercera jueza) en audiencia de lectura de sentencia realizada este miércoles 15 de junio, de manera unánime, condenó a 50 años de prisión a una abogada de 45 años, en calidad de autora de los delitos contra la vida e integridad personal (homicidio doloso agravado), contra la vida e integridad personal (homicidio simple), contra la seguridad colectiva y contra la fe pública (falsificación de documentos en general y falsificación de sellos públicos), y no culpable en el delito de asociación ilícita para delinquir, en perjuicio de un canadiense y un panameño.

En ese sentido, el tribunal colegiado adecuó la pena de acuerdo a las circunstancias, la necesidad, proporción y razonabilidad, y luego de analizar los parámetros aplicó los artículos 131 y 132 del Código Penal, por el homicidio agravado en perjuicio del ciudadano de nacionalidad canadiense y la sentenció a 25 años. Por el homicidio simple, en perjuicio de un panameño, aplicó el artículo 131 del Código Penal y la condenó a 25 años. Así mismo, por el delito de falsificación de sellos públicos, aplicó el artículo 380 y la condenó a 4 años, y por el delito de falsificación de documentos públicos en perjuicio del canadiense, se aplicó el artículo 366 con una condena de 4 años.

Este tribunal de juicio oral, previo a un veredicto de culpabilidad, en la sentencia condenatoria N° 33/TJO también decretó como pena accesoria la inhabilitación para ejercer la profesión de abogacía por el término de 25 años, una vez culmine la pena principal.

En esta audiencia, el Ministerio Público estuvo representado por los fiscales Zulma Dip, Enrique Chen y Ayda Soto. Mientras que por la defensa técnica particular fungió Manuel Calvo, quien anunció recurso de anulación.

Esta causa penal se inició en octubre de 2017, en el corregimiento Rufina Alfaro, sector de San Antonio del distrito de San Miguelito, cuando fueron encontrados los cuerpos sin vida de un canadiense y un panameño.